Las setas alucinógenas o psilocibinas que crecen en muchas partes del mundo, incluida Polonia, contienen psilocibina. La percepción de estos hongos es ambigua. Algunas personas las consideran una droga muy peligrosa que conduce al desarrollo de trastornos mentales y adicción. Otros opinan que la psilocibina es una sustancia recreativa inofensiva, además de eficaz. Un creciente número de investigaciones indica que puede tener aplicaciones en psiquiatría. ¿Qué efectos positivos puede tener el consumo de setas de psilocibina y cuánto hay de cierto en las creencias populares sobre ellas?
- Efectos de las setas de psilocibina en la neurogénesis y la neuroplasticidad
- Las setas de psilocibina mejoran la creatividad
- La psilocibina puede ayudar a tratar la ansiedad
Efectos de las setas de psilocibina en la neurogénesis y la neuroplasticidad
El cerebro utiliza conexiones específicas entre células nerviosas, o las llamadas vías neurales, en sus actividades diarias. Conectan áreas individuales del cerebro para que puedan comunicarse fácilmente.
Se crean nuevas vías cuando aprendemos algo nuevo o durante acontecimientos significativos. La neuroplasticidad es la capacidad del cerebro para crearlas.
Hasta hace poco, se pensaba que el cerebro adulto maduro ya no formaba nuevas neuronas ni conexiones entre ellas, lo que se supone relacionado con la incapacidad del órgano para regenerarse.
Sin embargo, estudios realizados con imágenes de resonancia magnética han demostrado que el cerebro bajo los efectos de la psilocibina no sólo utiliza vías ya existentes, sino que crea otras nuevas. Estas conexiones son temporales y en su mayoría desaparecen cuando pasan los efectos de las setas alucinógenas, pero forman conexiones entre zonas del cerebro que no se comunican entre sí a diario. Esto produce sensaciones como la sinestesia (una fusión de los sentidos que permite, por ejemplo, saborear colores o ver sonidos) o una expansión de la conciencia.
Un estudio realizado en la Universidad del Sur de Florida con ratas demostró que la psilocibina aumentaba la neuroplasticidad, facilitando a los animales el aprendizaje y la superación del miedo.
Todo esto ha llamado la atención de científicos y psiquiatras, que ven en los hongos alucinógenos un medio para ayudar a tratar daños en el tejido cerebral y enfermedades neurodegenerativas y trastornos mentales.
Las setas de psilocibina mejoran la creatividad
Aunque no se ha investigado mucho cómo la psilocibina puede estimular la creatividad, muchas personas, como artistas y músicos, utilizan las setas alucinógenas como medio para expandir la conciencia y facilitar la "apertura de la mente" a nuevas posibilidades e ideas.
Se realizaron estudios sobre este tema en la década de 1960 y en 2018, entre otros; sus resultados indican que las personas a las que se les administraron setas de psilocibina obtuvieron mejores resultados en situaciones que requerían resolver distintos tipos de problemas. Los investigadores observaron que utilizaban mejor sus conocimientos, mostraban más flexibilidad y encontraban más cursos de acción posibles.
La psilocibina puede ayudar a tratar la ansiedad
Un estudio realizado por investigadores de la Universidad Johns Hopkins descubrió que las setas alucinógenas combinadas con psicoterapia reducían notablemente los niveles de ansiedad de los pacientes, incluidos los que padecían cáncer u otras enfermedades crónicas.
Tras seis meses de terapia, hasta 80% de ellos vieron calmados sus síntomas de ansiedad. Al cabo de otros seis meses, 83% de los pacientes afirmaron que su calidad de vida había mejorado significativamente, y casi dos tercios consideraban la terapia con hongos alucinógenos como una de las experiencias más importantes de sus vidas.
Los estudios similares han sido escasos hasta la fecha, pero ofrecen esperanzas de un tratamiento eficaz para los pacientes que luchan contra la ansiedad grave.
Las "setas mágicas", una oportunidad en el tratamiento de adicciones
Un mito muy repetido sobre las setas alucinógenas, difundido especialmente por los partidarios de su ilegalización, es su supuesto potencial adictivo.
Sin embargo, numerosos estudios realizados desde los años 50 han demostrado que la psilocibina no es adictiva. Además, han demostrado que las setas de psilocibina pueden ayudar a combatir los hábitos que forman parte esencial de cualquier adicción gracias a su efecto beneficioso sobre la formación de patrones de comportamiento.
Investigadores de la Universidad Johns Hopkins explican que detrás de las adicciones hay un patrón fijo de comportamiento y percepciones estrechas, que hacen que el paciente sea incapaz de ver la posibilidad de cambiar sus patrones de funcionamiento. Las setas de psilocibina contribuyen a ampliar la imagen de la realidad que tiene la persona bajo su influencia y le ayudan a ver otras soluciones a los problemas que intenta afrontar mediante hábitos nocivos. Esto, la mejora de la neuroplasticidad cerebral y una toxicidad insignificante hacen que las setas alucinógenas puedan ser un apoyo eficaz para la psicoterapia de la adicción a la nicotina o al alcohol o (como indica un estudio de 2018 en Alabama) la adicción a la cocaína.
Hongos alucinógenos en el tratamiento de trastornos mentales
Los beneficios de las setas de psilocibina se discuten cada vez más en el contexto de su uso potencial en el tratamiento de trastornos psiquiátricos. Esto se aplica principalmente a la depresión, pero también al TEPT (trastorno de estrés postraumático) y al trastorno obsesivo-compulsivo (TOC).
Trastorno obsesivo-compulsivo
Estudios realizados en la Universidad de Arizona, entre otras, han demostrado que la psilocibina se une a los receptores de serotonina del cerebro, regulando su función y aportando alivio a los pacientes que luchan contra la necesidad de repetir ciertos comportamientos que se produce en el TOC (trastorno obsesivo-compulsivo).
Trastorno de estrés postraumático
Estimular la neurogénesis puede, a su vez, ser útil en el tratamiento del TEPT. Hasta la fecha, los únicos estudios relacionados con este trastorno se han realizado en animales, pero los resultados apoyan provisionalmente esta tesis.
La primera etapa de este estudio consistió en inducir una respuesta de dolor en ratones mediante impulsos eléctricos, combinados con una señal sonora. De este modo, los ratones mostraban signos de dolor al cabo de cierto tiempo cada vez que oían ese sonido.
En la siguiente fase, se les administraron setas alucinógenas; al cabo de cierto tiempo, los síntomas de dolor de los ratones disminuyeron. Esto se debió a la formación de nuevas células y conexiones nerviosas y a la regeneración de células dañadas en el hipocampo, la parte del cerebro responsable de la memoria a largo plazo.
Las setas de psilocibina, ¿una alternativa a los ISRS?
Los estudios realizados con voluntarios también indican que las setas de psilocibina podrían convertirse en el futuro en una alternativa a los antidepresivos actualmente en uso. Su gran ventaja es su insignificante toxicidad y, por tanto, la ausencia de efectos secundarios a los que se enfrentan los usuarios de inhibidores de la recaptación de serotonina (ISRS), entre otros.
Según una investigación realizada en la Universidad de California, la psilocibina estimula la actividad de los neurotransmisores a largo plazo. Esto, a su vez, conduce a la formación y fortalecimiento de redes neuronales en el córtex prefrontal, crucial en la regulación de las reacciones emocionales, el estado de ánimo y la ansiedad, así como en el hipocampo, centros cuyo encogimiento se observa en pacientes con depresión.
Setas de psilocibina - mitos populares
Las setas de psilocibina provocan alucinaciones
Contrariamente a su nombre común, las setas alucinógenas no provocan alucinaciones, es decir, no hacen que uno vea objetos que no están presentes en la realidad.
La psilocibina provoca una sensación de ampliación y transformación de la realidad: se puede tener la sensación de que otras personas u objetos tienen formas extrañas o se están transformando en otra cosa, por ejemplo.
Esto se debe a la ya descrita comunicación de partes del cerebro que normalmente no están conectadas entre sí. Sin embargo, el término "setas alucinógenas" se ha arraigado en el lenguaje cotidiano.
Las setas alucinógenas crean una fuerte y rápida adicción
Se trata de un mito muy extendido. Sí, la tolerancia a las setas aumenta con el tiempo. Sin embargo, los estudios científicos indican que la psilocibina es una sustancia con un potencial adictivo insignificante (se podría suponer que nulo). Es significativamente menor que, por ejemplo, la cafeína.
Además, no provoca síndrome de abstinencia ni el deseo de recurrir a otros estimulantes. Al contrario, como ya se ha mencionado, puede apoyar el tratamiento de otras adicciones.
Las setas alucinógenas causan esquizofrenia
La creencia de que el consumo de psicodélicos puede causar esquizofrenia se remonta a la década de 1960. Sin embargo, la psiquiatría moderna indica que diversos tipos de estados psicóticos y alucinaciones afectan aproximadamente al 2% de la población, por lo que una correlación casual puede confundirse con una relación causa-efecto.
Los hongos alucinógenos son conocidos por la humanidad desde hace milenios. En el siglo XX, han surgido una serie de creencias necesariamente ciertas en torno a su consumo, lo que ha dificultado mucho la investigación científica sobre los efectos de las sustancias que contienen en el cuerpo humano. Sin embargo, las que se han llevado a cabo indican que las setas que contienen psilocibina pueden estar entre los estimulantes más seguros con un claro potencial medicinal. Sin embargo, se debe tener precaución cuando se decida consumirlas. Esto es especialmente cierto para las personas con riesgo de desarrollar esquizofrenia; también merece la pena consultar a un médico, sobre todo cuando se trata de automedicarse por adicción o trastornos mentales.
Un ejemplo de hongo psilocibínico es el Cardo lanceolado y Maestro de Oro - comúnmente denominados alucinadores.
¿Alucinógenos? ¿Hongos mágicos? ¿Hongos?
Alucinaciones es un nombre coloquial y diminutivo para las setas de psilocibina - un nombre bonito - demasiado infantil para algunos y formado a partir de una mala palabra... porque las alucinaciones no son después de los alucinógenos. Hay muchos tipos de setas que se consideran alucinógenas. En Polonia, una de las más populares es la lanceolada. Tales setas mágicas En contra de la intuición, difieren considerablemente en el contenido de sus sustancias activas y, de hecho, no todas producen la misma alteración perceptiva.
CONTENIDO:
- Setas alucinógenas
- ¿Por qué no habría que calificar estas setas de alucinógenas?
- Setas de psilocibina: ¿de dónde viene su nombre?
- Otros nombres para los alucinógenos
ver también:
- setas alucinógenas precio
Setas alucinógenas
Los lanceletes son los más populares en Polonia alucinaciones. El principal ingrediente psicoactivo de esta variedad es la psilocibina. Estas setas se consumen frescas, pero también pueden decoctarse o secarse. Pero, en contra de lo que pueda parecer, no sólo se utilizan para intoxicar; de hecho, ese uso es ilegal, ya que también pueden emplearse con fines de investigación. Ciprés calvo lanceolado es una de estas especies alucinarque se encuentra en casi todo el mundo. Su cultivo en condiciones controladas tampoco plantea problemas.
¿La denominación "setas alucinógenas" es errónea?
Lo más habitual es decir que las setas de psilocibina son alucinógenas. Pero utilizar la palabra alucinógeno o alucinaciones no es del todo válida. Esto se debe a que el consumo de este tipo de seta psicoactiva no provoca alucinaciones. / sino que levanta el ánimo y mejora el humor. También puede afectar a la percepción sensorial. Por supuesto, el efecto es individual y a menudo impredecible. Curiosamente, sin embargo, la sustancia activa psilocibina también se utiliza en medicina, por ejemplo para tratar la depresión o el trastorno de estrés postraumático. Por este motivo, no pueden considerarse estrictamente alucinógenos. /
Setas de psilocibina: ¿por qué ese nombre?
Las setas alucinógenas suelen denominarse alucinacionessetas mágicas. Se trata de una especie de setas de psilocibina cuyo consumo tiene un efecto real sobre el estado de ánimo, la orientación o la variación del pensamiento. El término setas de psilocibina hace referencia al hecho de que todas estas especies poseen el compuesto químico psilocibina. Es importante destacar que se trata de un grupo de hongos que no es un taxón, por lo que no están emparentados y esto es cierto tanto en el sistema de parentesco filogenético como en las taxonomías populares. Todos los hongos alucinaciones pueden inducir la llamada experiencia psicodélica. Conviene saber que no sólo el compuesto psilocibina es responsable del efecto psicoactivo, sino también la psilocina, cuyo contenido en las setas es menor. Algunas setas también contienen baeocistina o norbaeocistina. Estas setas se encuentran en la naturaleza y suelen ser pequeñas, de color marrón o amarillo parduzco, y se confunden muy fácilmente con especies no comestibles o venenosas. Un rasgo característico es la coloración azul o verde de la carne cuando se corta.
¿Otros nombres?
El nombre también se utiliza para el grupo de hongos psilocibios alucinaciones, Halos o setas mágicas. Magic mushrooms, shrooms son los nombres de estas setas utilizados en inglés. Entre las especies más populares se encuentra la cubensis. En alemán, las setas se denominan Halluzin-Pilze o Halluzinationen. En francés, en cambio, se utiliza el nombre champignons psychodéliques o champignons magiques.
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Párrafos principales
- Efectos de las setas de psilocibina en la neurogénesis y la neuroplasticidad
- Las setas de psilocibina mejoran la creatividad
- La psilocibina puede ayudar a tratar la ansiedad
- Las "setas mágicas", una oportunidad en el tratamiento de adicciones
- Trastorno obsesivo-compulsivo
- Trastorno de estrés postraumático
- Las setas de psilocibina, ¿una alternativa a los ISRS?
- Las setas de psilocibina provocan alucinaciones
- Las setas alucinógenas crean una fuerte y rápida adicción
- Las setas alucinógenas causan esquizofrenia